Amateurismo al Mando: Orrego desconectado de la realidad sanjuanina

La gestión de Marcelo Orrego al frente del gobierno de San Juan parece transitar por un camino tortuoso, marcado por una serie de desaciertos que no solo cuestionan su capacidad de liderazgo, sino también el sentido común y la empatía hacia los sanjuaninos. Su reciente declaración en Cadena3, apoyando a Milei en lo que solo puede describirse como un inexplicable acto de amateurismo político, revela una desconexión alarmante con la realidad de su provincia y las necesidades urgentes de su gente.

Este episodio es solo la punta del iceberg de una serie de eventos que reflejan una gestión carente de la seriedad y profundidad requerida para afrontar los desafíos de la administración pública. La acusación de traición lanzada desde la cuenta oficial de la presidencia contra la Diputada Nancy Picon, seguida por la filtración de un audio de Milei manifestando intenciones que rozan la irresponsabilidad fiscal, son claros ejemplos de un teatro político que San Juan no puede permitirse.

En tan solo 60 días de gobierno, Orrego ha conseguido generar un malestar palpable entre los empleados públicos por incumplir con acuerdos paritarios y omitir la cláusula gatillo de diciembre de 2023. La situación en los hospitales, carentes de insumos básicos, y la falta de asistencia alimentaria para los sectores más vulnerables, pinta un cuadro de negligencia y abandono. El malestar de las fuerzas policiales, el sector privado enfrentando una ola de despidos, el cierre de empresas, y un desplome en las ventas y la recaudación completan este paisaje desolador.

Orrego, en lugar de enfrentar estos problemas con acciones concretas y soluciones efectivas, opta por declaraciones que distan mucho de la realidad y las urgencias de los sanjuaninos. Su apoyo a políticas que indirectamente contribuyen al deterioro de la calidad de vida en San Juan, como el fin de la obra pública y el apoyo tácito a iniciativas que perjudican el poder adquisitivo de los ciudadanos, plantean serias dudas sobre su visión y prioridades como gobernador.

La retirada del Incentivo Docente y la eliminación de fondos compensador, que resultan en un deterioro del poder adquisitivo de los docentes y en un aumento significativo en el costo del transporte público, son medidas que golpean directamente al corazón de la población. ¿Es esta la gestión que los sanjuaninos merecen? ¿Es acaso Orrego el líder que prometió ser, o se está revelando como un actor de una pieza teatral mal dirigida, donde los ciudadanos son meros espectadores de su desgracia?

Señor gobernador, es imperativo recordar que su rol no es el de un espectador pasivo ni el de un actor en busca de aplausos fáciles. Usted tiene en sus manos el destino de una provincia que clama por liderazgo real, gestión efectiva y una visión clara que trascienda las disputas políticas y se enfoque en el bienestar de sus habitantes. La paciencia de los sanjuaninos se agota, y la historia no será indulgente con aquellos que, habiendo tenido la oportunidad de marcar una diferencia, eligen el camino de la inacción y el desacierto. Es hora de rectificar el rumbo y demostrar que su gobierno puede y debe ser una fuerza de cambio positivo para San Juan. La responsabilidad es enorme, pero aún hay tiempo para cambiar el guion y evitar que su gestión sea recordada como un lamentable capítulo en la historia de la provincia.